Una casa ecológica en estos tiempos que corren no solo es mejor por ser mas respetuosa con el medio ambiente (que falta nos hace), sino que también puede ayudarnos con las facturas al ahorrar energía (que nos hace mas falta todavía a día de hoy).
Aquí os dejo una lista de consejos, espero que os sirvan.
El ABC de la casa ecológica
Gestión energética, sello FSC, geotermia… ¿Sabes realmente qué son? Aclara tus dudas con este ecodiccionario. Son 32 ideas para ahorrar energía y hacer tu casa más sostenible.
El ecodiccionario de la casa ecológica
A
Aerogenerador: es un aparato que genera y almacena energía eléctrica a través del viento. Un par de aerogeneradores podrían abastecer la electricidad necesaria para una vivienda que optimice su consumo de luz.
Aireadores de grifo: con estos apliques para la grifería reducirás hasta un 50% la cantidad de agua que gastas al abrir un grifo. No notarás una reducción en la presión, solo tardarás más en llenar un cubo de agua.
Aislamiento térmico: consiste en evitar la entrada de calor y frío y ahorrar en consumo energético. Se logra con materiales de construcción ecológicos como cáñamo, corcho, fibra de papel o ropa reutilizada.
B
Bambú: madera tropical de crecimiento acelerado e impermeable, una maravilla ecológica. El único inconveniente es que crece en lugares lejanos y se ha de importar. Es imprescindible que tenga el sello FSC.
Bioconstrucción: técnica de diseño y construcción para crear casas y edificios respetuosos con el medio ambiente con interiores saludables. Tu casa se convierte así en tu segunda piel, te protege y te ayuda a sentirte saludable.
Biomasa: es un combustible para calderas, cocinas o chimeneas creado con materia orgánica. La más popular es la leña, pero hoy hay pastillas de biomasa (a base de hueso de aceituna, cáscaras de frutos secos…) más eficientes.
Bitérmicos: así se llaman los electrodomésticos que disponen de una toma de agua caliente independiente de la fría. Así, el agua caliente les llega de la caldera y se ahorra la energía eléctrica que haría falta para calentarla con resistencias.
Bomba de calor: es un eficiente sistema de climatización. Realiza un intercambio de temperatura que puede generar calor o frío. Puede extraer el calor de la tierra o de placas solares, pero entonces su instalación es complicada y cara.
C
Cal hidráulica: los morteros y pinturas de cal se han utilizado desde hace cientos de años en España. Embellecen, protegen y dejan que las paredes transpiren. La cal, además, por su bajo PH evita la proliferación de hongos.
Calor residual: Calor generado y liberado al ambiente por las máquinas en funcionamiento, como neveras o televisores. Las casas 100% sostenibles (bioconstrucción) son capaces de controlarlo y reutilizarlo para calefacción o agua caliente.
Cisterna de descarga variable: cisterna que controla la cantidad de agua necesaria para el inodoro. Suelen tener dos descargas: corta y larga. Ten en cuenta que cada vez que usas el inodoro “tiras” 6 litros de agua.
Climatización radiante: climatización que se instala bajo el pavimento (en el techo o en las paredes). Emite calor y frío a través de un circuito de tuberías, de forma pausada y continuada, y consume menos que otros sistemas.
Consumibles fósiles: materiales creados durante miles de millones de años que son consumidos por el ser humano para crear energía pero que son irrecuperables, un día se acabarán: el carbón, el petróleo y el gas.
COV: los compuestos orgánicos volátiles son sustancias químicas que se usan como disolventes en muchas pinturas y barnices. Se evaporan a temperatura y presión ambiental y son tóxicos.
D
Depósito pluvial: es un contenedor para almacenar y aprovechar el agua de la lluvia. Un agua que se puede reutilizar para el riego, para las cisternas de los baños e incluso para la ducha. Eso sí, no es adecuada para su consumo oral.
E
Efecto invernadero: además del calentamiento global, es un sistema para calentar la casa. Un acristalamiento orientado al sur hará que el sol caliente el suelo y el calor no se disipe. Es una calefacción sin consumo eléctrico.
Efecto Venturi: es la succión que produce el viento al pasar por un lugar estrecho. Una chimenea bien diseñada debe tener un estrechamiento en la parte alta para que el viento mejore el tiraje sin necesidad de extractores eléctricos.
Eficiencia energética: tu casa pierde calor en invierno y frío en verano. Ahorra un 60% de energía reduciendo sus pérdidas. Revisa y mejora el aislamiento con ventanas de doble acristalamiento y con rotura de puente térmico.
Estufas de masa térmica: de gran eficiencia, se encienden un periodo controlado y calientan la masa que las rodea (500 kg de ladrillo macizo por ejemplo). El ladrillo acumula el calor y lo libera poco a poco, con la estufa apagada.
Etiqueta energética: sistema europeo de clasificación de electrodomésticos –y también viviendas–, que indica al consumidor el consumo energético del producto. En electrodomésticos, la mejor clasificación es A+++.
F
FSC: madera ecológica. “Forest Stewardship Council” (FSC) es una certificación internacional que garantiza el origen de la madera. Es la confirmación de que procede de bosques de explotación sostenible, garantía de preservación de los bosques.
G
Geotermia: es el aprovechamiento de la temperatura constante del subsuelo (que está a unos 10-15 ºc todo el año) para enfriar y calentar el interior de la casa. Es 5 veces más eficiente que una bomba de calor.
Gestión energética: una buena gestión de la energía que consume nuestra casa (agua, gas, electricidad…) puede reducir hasta un 80% el impacto medioambiental y, por tanto, nuestra huella ecológica sobre el planeta.
Gestión hídrica: se trata de reducir el gasto de agua con limitadores de caudal, depósitos pluviales… España consume 171 litros por habitante y día, 121 más de los establecidos por la OMS para cubrir necesidades básicas.
H
Huella ecológica: es el impacto que la actividad humana tiene sobre el planeta. Se mide según el territorio que la Tierra necesita para regenerar lo que una sola persona consume. Haría falta un territorio de 3,5 veces España para sostener nuestro estilo de vida.
I
Inercia térmica: es la capacidad que tienen algunos materiales, como los ladrillos macizos, la piedra o el hormigón, de acumular calor para después liberarlo pausadamente al ambiente. Un calor que puede reducir el uso de sistemas de climatización y el gasto energético.
L
LEDS: los LEDs representan el futuro en luz artificial, porque consumen un 30% menos que otras bombillas, duran hasta 30.000 horas y su luz siempre tiene la misma intensidad. Los puedes encontrar de luz cálida, fría e incluso coloreada.
Linóleo: es un pavimento continuo fabricado a base de aceite de linaza, resina, harina de corcho, de madera y de creta, pigmentos naturales y yute. Su principal inconveniente es que el proceso de su fabricación sí es contaminante.
P
Paneles termosolares: paneles que, mediante el aprovechamiento del efecto invernadero, utilizan la radiación del sol para calentar agua. En viviendas, pueden abastecer de agua caliente sanitaria y reducir así el consumo energético.
Pintura de silicato: alternativa a la pintura de cal, tiene las mismas propiedades pero más aplicaciones y más variedad de colores. Se puede aplicar en interiores, es la pintura saludable por excelencia.
Puente térmico: en un mal aislamiento, la ventana tiene un intercambio de temperatura (puente térmico) con el exterior de hasta 150 veces superior a lo ideal. Por eso se aconsejan las carpinterías con rotura de puente térmico, son más aislantes.
T
Telas ecológicas: son tejidos de elaboración ecológica, es decir, sin aplicación de ningún tipo de química, pesticida o fertilizante. También se reduce al mínimo el gasto de agua y se utilizan energías renovables para su fabricación.
V
Ventilación cruzada: se da en casas con ventanas en orientaciones opuestas (norte-sur, este-oeste). Si abres estratégicamente las ventanas podrás hacer circular el aire y refrigerar la casa de una manera natural.
Sigue las reglas de las ‘4 erres’
1. Reducir. Compra electrodomésticos de alta eficiencia energética, A+ o superior, para reducir el consumo. Evita comprar productos innecesarios o con un exceso de embalaje.
2. Reutilizar. Da un segundo uso a los objetos o repáralos si es posible. Confecciona fundas de cojín con retales de tela antigua, recupera tus muebles antiguos o crea cuberteros con tus macetas viejas.
3. Reciclar. Utiliza 5 cubos de reciclaje: papel, plástico, vidrio, residuo orgánico y desecho. Con estos residuos se pueden volver a crear productos para los mismos o diferentes usos.
4. Reflexionar. Antes de comprar un nuevo producto, analiza sus prestaciones. Y asegúrate de que es la mejor opción desde un punto de vista medioambiental. Elígelos de fabricación cercana y con sello ecológico.
Como podéis ver hay muchas cosas que podemos hacer para conseguir una casa ecológica, ¡hala! manos a la obra.
Vía elmueble.com